Practica
el “SER CONSCIENTE” cuando bebes.
Te
propongo un camino práctico para que la actividad cotidiana de
beber nos ayude a “ser más conscientes”.
Armoniza
el agua que te bebes a través de las palabras escritas en los vasos.
Equilibra tu cuerpo, mente y espíritu a través del acto de beber.
El poder más milagroso que tienen las palabras es su capacidad curativa.
Con la palabra podemos aliviar dolores, lidiar con nuestras dudas, rabias y culpas, concluir duelos, sanar heridas, alejar miedos, soltar yugos, liberar y liberarnos.
Abre
caminos que te conduzcan a la paz interior, la armonía con el mundo
y sé verdaderamente feliz.
Ponte a experimentar:
Siente
que necesitas integrar, y escríbelo en el vaso donde bebes.